Aquí estoy, aquí estamos, solo por un instante, solo por un pequeño, pero infinito momento bajo tu cautela, ante tu mirada, aquí quiero estar, por mucho tiempo así, que no me distraiga nada de tu mirada, que pueda decirle que no por una vez a lo que me rodea, a lo que me aqueja, a lo que nos aqueja.
Ven y siéntate por más que un instante aquí a mi lado, tómame de la mano y no me vuelvas a soltar, extiende solo tú la mano a quien ante el llanto, la suplica de quienes necesitan de tu calor no son capaces de aguardar la espera por tu palabra, la hiel del entorno, la miel de tus ojos, rasantes pasan y aguardan los minutos y segundos de quienes esperan por ti, amor que cubre toda falta, raudo que no soporte el quebranto, la desesperación de sentir tu mano en mi espalda cuando es menester, míranos de frente y no nos dejes de tu mano poderosa, por favor, no te alejes que me desvanezco por instantes, hazles a ellos sentir que no les has dejado solos tampoco, ve tu y entra en sus sueños, fija tu mirada en ellos, renueva los lazos que tan fuertemente me unen a ellos, bajo tu seno dales el descanso y renuevo por el que ellos claman, respira en mi, déjanos ver tu cara, que inmerso dentro de la retina de tu amanecer, pueda sentir el viento de tu boca entre mis dedos, entre nosotros, que cuando nadie te ve, sientas que el te lleva lejos de aquí, lejos de mi, lejos de ti, solo hazlo cuando nadie te ve, cuando nadie te ve, cuando nadie te escuche, porque ahí es cuando el nos oye mas que en otro momento, por que cuando nadie te ve es cuando aprietan las clavijas, es cuando te forma, es cuando te sana y libera, deja ese llanto cuando nadie te ve.
Al fin cuando eso pase, me sentiré renovado, pídele.